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Mineduc conmemoró Día Internacional de la Alfabetización

Desde 1967, cada año y en todo el mundo, el 8 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Alfabetización para recordar su importancia como factor de dignidad y de derechos humanos, como así también para evidenciar los avances obtenidos en la agenda global de alfabetización, buscando una sociedad más instruida y sostenible. Considerando los logros alcanzados, los desafíos persisten, ya que actualmente cerca de 773 millones de adultos en el mundo no poseen las competencias básicas en lectoescritura.

A nivel nacional, según la encuesta casen 2017, la tasa de analfabetismo es de 3,6% y en cuanto a tramos de edad, la mayor cifra se encuentra en la tercera edad, con personas de sesenta años o más, grupo que alcanza el 8,2%, seguido de adultos de 45 a 59 años que llegan a un 3,7%, mientras que en el tramo de los 30 a los 44 años la cifra es de 1,8% y en jóvenes de 15 a 29 años es de 1,1%. En tanto, en la región de Antofagasta, la tasa de baja escolaridad según el último censo llega a un 3,4%, mientras que la de analfabetismo alcanza un 2,2%.

“En una primera etapa, la alfabetización es muy importante porque nos permite comunicarnos de forma efectiva con el resto de las personas, utilizando diferentes canales de acuerdo a cada situación en particular. También nos ayuda a comprender documentos legales y a conocer nuestro mundo, ampliando nuestro rango de conocimiento, por medio de libros, folletos y gran variedad de material escrito o digitalizado”, aseguró el Seremi de Educación Hugo Keith.

Para mitigar esta brecha, el Ministerio de Educación desarrolla el Plan Alfabetización “Contigo Aprendo”, el cual es una iniciativa educativa de inclusión social, que se realiza en todo el país, tanto en las ciudades como en localidades rurales, cuyo objetivo es que las personas adquieran y desarrollen las habilidades de lectura y escritura y matemáticas para lograr aprendizajes que les permitan certificar 4° año básico.

La autoridad regional de educación explicó que su operatividad se lleva a cabo en grupos pequeños a cargo de un monitor o monitora de alfabetización, que guía y facilita un proceso educativo fundado en el diálogo permanente, incorporando las experiencias y los conocimientos que aportan las y los integrantes del grupo, facilitando así, el desarrollo de nuevas habilidades y la adquisición de nuevos aprendizajes.

“Esta actividad educativa es totalmente gratuita. El Ministerio de Educación entrega textos y materiales a los y las estudiantes y otorga un certificado de primer nivel básico (equivalente a 4° año básico), a quienes aprueben el curso. La certificación es válida para todos los efectos legales”, destacó.

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